Las consultoras que llaman desde Buenos Aires para medir la intención de voto se transformaron en el ruido molesto de las viviendas neuquinas durante el último mes. El teléfono suena desde el alba hasta pasadas las 22 y la última pregunta al cabo de dos minutos de charla es para saber si el el diez de marzo el sufragio será por el cambio o la continuidad.
La pregunta resulta difícil de desentrañar en una provincia que en 2015 votó a favor del candidato de la ex presidenta Cristina Kirchner, pero en las legislativas de 2017 optó por el macrismo. Al mismo tiempo, salvo durante la irrupción de la dictadura los electores eligieron al Movimieno Popular Neuquino (MPN) para que gobierne la provincia durante los últimos cincuenta años. Sin embargo la mayoría votó en contra del MPN en las ciudades que concentran casi el ochenta por ciento de la población, donde las intendencias están en manos de la oposición local. El partido gobernante perdió el bastión de la capital (donde vive la mitad de los neuquinos) a manos del macrismo; mientras otras tres localidades (Centenario, Zapala y Cutral Có), que concentran el treinta por ciento del electorado, están en poder del kirchnerismo.
Mañana se votará por primera vez en Neuquén con boleta única electrónica y los resultados se sabrán pocas horas después del cierre de urnas. De un padrón de casi 500.000 electores, 476.000 imprimirán su voto en una pc; el resto –habitantes de los poblados más chicos y alejados– lo harán con el tradicional sistema de papel.
Son nueve las fórmulas a gobernador y vice. También se eligen intendentes y concejales en 52 municipios (la capital decidirá su gobernante recién en octubre). En el mismo acto se votarán dos categorías distintas: primero quién gobernará Neuquén y luego la opción por la ciudad. Si gana el MPN no habrá cambio en el plano provincial y el gobierno de la nación podrá relanzar la estrecha alianza que en campaña el gobernador Omar Gutiérrez pretende soslayar para no perder votos. Por eso decidió adelantar las elecciones, para evitar el efecto “arrastre” y la grieta. Con la inflación en alza y los alertas por suspensiones en la zona petrolera, intensificó la campaña en la calle con el acento en los beneficios de ser “neuquino” e “independiente” del signo nacional.
La mayoría de los encuestadores señalan que la dupla Gutiérrez (MPN) - Rioseco (Frente Neuquino – Unidad Ciudadana) pelean la gobernación, relegando a Cambiemos a un “tercero cómodo”. Pero el radical Horacio “Pechi” Quiroga, candidato de Cambiemos, asegura que las encuestas de Julio Aurelio dan un escenario de tercios, amparado en su buena performance en la gestión de la ciudad que concentra más de 200.000 electores.
“Si al MPN lo votaran todos sus afiliados (más de 110.000) no habría chances, pero eso no va a suceder; por eso sacaron todo su aparato a la calle ante la posibilidad de perder”, dijo un seguidor de Rioseco, asiduo lector de encuestas y hábil para medir el pulso de las y los punteros en los barrios. En efecto, el oficialismo activó el rastrillo de lealtades en los territorios y movilizaron funcionarios de todo el aparato del Estado, desplegando la campaña desde cada oficina y acto público.
Por su parte el ex intendente de Cutral Co, Ramón Rioseco, quien afianzó su liderazgo al calor de las puebladas de la comarca petrolera en los años noventa y desde entonces resulta imbatible, fundó el partido “Unión de los Neuquinos” (UNE) con el objetivo de destronar al MPN y, en un acuerdo con el PJ Neuquino, consiguió encabezar la fórmula peronista. Dicen que gracias al favor de Cristina Kirchner. Un aporte fundamental en este diagrama, que incluye al diputado nacional Darío Martínez como vice, fue la actual intendenta de Zapala, Soledad Martínez, integrante del Frente Grande, quien encabeza la lista de diputadas. “Tenemos un proyecto provincial, pero si al país le va mal no hay provincia que salga adelante”, dijo Rioseco para marcar su alineamiento con Unidad Ciudadana.
En la zona cordillerana la localidad con mayor población es San Martín de los Andes, un bastión del MPN. Sorpresivamente las encuestas ubican en una posición expectante al candidato del peronismo, Martín Rodríguez, histórico dirigente de ATE.
Otro dato llamativo en los sondeos es el cuarto lugar que le auguran al tres veces gobernador por el MPN, Jorge Sobisch, que se presentó con el sello de la Democracia Cristiana. En una provincia donde la policía se jactó de matar al maestro Carlos Fuentealba durante su gestión, al oficialismo le preocupan los casi diez puntos que podría promediar Sobisch.
Cuando la campaña entró en la cuenta regresiva, el debate se nacionalizó. Quiroga dijo que su gobierno sería más eficiente para las políticas del presidente Maurici Macri que el de Gutiérrez y se mostró con Patricia Bullrrich, el ministro de Transporte Guillermo Dietrich y el dirigente radical mendocino Alfredo Cornejo. Rioseco recibió a dirigentes nacionales como Alberto Fernández, Axel Kicillof y el dirigente del PJ porteño Victor Santa María. También circuló un video con la propia Cristina Kirchner invitando a votar por el candidato peronista. El kircherismo espera una buena elección para que el caballito de batalla de la unidad se convierta en una señal para octubre.
El resto del arco opositor incluye al ceramista que transformó la ex Zanón en la Fábrica Sin Patrones (Fasinpat), Raúl Godoy, como candidato a gobernador por el Frente de Izquierda; Alejandro Vidal por el partido Iguales; Sergio Rodríguez irá con el peronismo que no aceptó la conducción de Rioseco (Frente Social por la Dignidad); y dos candidatas mujeres, Mercedes Lamarca (Libres del Sur) y Priscila Otton (Nueva Izquierda).
La principal incógnita que se develará mañana es si la dupla Rioseco-Martínez logra terminar con cincuenta años de voto emepenista, el partido provincial que ahora es afín a Cambiemos como antes lo era al kirchnerismo. Para eso necesita que el componente de voto antimacrista se convierta en el factor de desequilibrio.
Bajo las marquesinas de una inevitable nacionalización de los resultados, en Neuquén se dirime otra contienda fundamental: en la provincia se asientan la formación Vaca Muerta y el yacimiento Loma de la Lata, los reservorios de petróleo y gas que sostienen la estructura energética argentina. Sobre este mar de recursos estratégicos se leerá el significado de la primera elección del cronograma 2019.