Ser fotógrafo francés y llamarse Niepce es una enorme responsabilidad, le digo aludiendo a su antecesor Joseph-Nicephore Niépce, el visionario que a principios del siglo pasado dedicó su vida al "invento" de la fotografía.
"Si, lo es y la acepto-afirma Janine Niépce. Pero lo que me resulta difícil Ies ser fotógrafo y mujer, porque en Fran- cia, que es el país de la libertad, está todo prohibido para el fotógrafo. Pero está doblemente prohibido si se es mujer."
Jeaninne, que pese a sus afirmaciones, ha logrado destacarse por medio de un trabajo continuo de gran nivel, realizó en un barrio próximo a París una muestra, "La femme avenir de l'homme" como forma de luchar por la liberación de la mujer. El título proviene de un poema de Aragón.
Janine Niépce comenzó, como casi todos, haciendo retratos y tomas publicitarias. Más tarde buscó testimoniar-no sin cierta nostalgia- una realidad que iba desapareciendo. "Tomo lo que nos queda de la vieja Francia.". Y esos reportajes fueron publicados en todo el mundo, incluso en libros personales con sus trabajos.
Hasta que llegó -también para Janine- el mayo francés de 1968. En octubre de ese año un club fotográfico "Les 30 x 40" (medidas internacionales para fotos de salones) rompiendo con criterios elitistas organizó una exposición con las fotos que se tomaron "durante los sucesos de mayo". Fue un éxito. Participaron Cartier-Bresson, Janine Niépce y otros muy cotizados fotógrafos, junto con anónimos, pero tan valiosos, testimonios.
Allí la conocimos. Nos confesó que comenzaría a trabajar en un extenso reportaje sobre Francia "lo único que conozco y lo único que me importa"- pero ahora trataría de documentar el cambio. Y con dureza agregó: "¡Basta de celebridades! Estoy cansada de rendir pleitesía a esos seres que se sienten tan importantes. Ya no hay tiempo para eso."
Y ha cumplido. En enero de 1974, visitamos su exposición.
"Mire usted misma. Los chicos se acercan a los paneles, se ríen, se ponen serios, preguntan. Comprenden mejor que los grandes porque no tienen preconceptos. No saben todavía qué es la "Belleza", el "Arte", tal cual los ha considerado la sociedad. Son libres ante las imágenes. Reaccionan por la imagen que ven allí y no por lo que aprendieron que deben ver en esas imágenes."
Y lo reafirma frente a una foto del preciso momento del parto, en el que la cabeza de un bebé penetra al mundo.
"Esta foto provoca reacciones curiosas. Mientras los grandes la rechazan, los chicos la miran con enorme curiosidad, preguntan si así llegaron ellos al mundo y se alejan contentos de haber visto finalmente como es... una cosa tan natural."
La muestra 80 fotografías en blanco y negro y unas pocas de color se subdividió en conjuntos temáticos, acompañados de citas de escritores, pensadores y poetas de todos los tiempos que reafirman las imágenes de Niépce sobre la liberación de la mujer. En "Infancia", bajo las fotos de una enseñanza mixta, Platón. afirma: "las mujeres deberán tener las mismas ocupaciones que los hombres"
"Elegir su vida" es quizá el tema más polémico. Fotos de casamientos tradicionales alternan con parejas en actitudes abiertas. Discusiones callejeras y manifestaciones a propósito del libre uso de anticonceptivos y de la legalización del aborto. Rimbaud afirma: "al amor hay que reinventarlo". Junto a ellas la serie "nacimiento del niño" y "vida familiar" ilustran la mutación de la familia y el nuevo rol del padre y de la madre, en función de la producción y en las diferentes clases sociales: "Estas diferencias es bueno. mostrarlas -reafirma Niépce- en estos centros culturales de barrio donde las exposiciones son abiertas y muy visitadas."
"La femme" es sin lugar a dudas un alegato, pero también una excelente muestra fotográfica. Se exhibirá durante un año en el interior de Francia, siempre en centros de cultura municipales. Luego iniciará una gira por el extranjero, coincidiendo con el Año Internacional de la Mujer, que se anuncia para 1975.